El pasado 14 de noviembre, los pasillos de nuestra escuela se transformaron en un verdadero laboratorio de ideas. La Feria Científica 2025 no solo fue una vitrina para el talento de nuestros estudiantes, sino también un ejemplo de lo que podemos lograr cuando trabajamos juntos como comunidad.
El protagonismo de nuestros estudiantes
Desde los más pequeños hasta los cursos superiores, los alumnos sorprendieron a los asistentes con proyectos y variados productos creados por ellos. Fue una jornada marcada por la curiosidad y el rigor científico, donde cada stand reflejó meses de trabajo.
Un compromiso compartido: El rol de los apoderados
Uno de los pilares de este evento fue la participación activa de los padres y apoderados. Con el objetivo de asegurar que la ciencia siga creciendo en nuestra institución, colaboraron activamente en la recolección de fondos.
Gracias a las ventas y actividades organizadas por las familias, ya contamos con una base sólida de recursos para la próxima feria científica. Este esfuerzo asegura que nuestros niños y niñas cuenten con mejores materiales y herramientas para seguir explorando el mundo que los rodea.
¡Gracias a todos por hacer de este 14 de noviembre un día inolvidable para la educación científica!
